Por Lic. Rogelio Nonini.
Pasaje 1 Timoteo 4:1-16
Introducción
En la iglesia cristiana todos somos ministros o sacerdotes 1 Pedro 2:9,10. Somos personas que servimos bajo la autoridad de otros, especialmente del Señor Jesucristo.
Dentro de la gama de ministerios, el apóstol Pablo enumera cinco: apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros, Efesios 4:11.
En nuestros días se ha sobredimensionado el ministerio pastoral en desmedro de los otros, al punto que algunos han desaparecido prácticamente. Por otro lado hay bastante desconocimiento en cuanto a la función actual de los apóstoles y profetas, lo que motiva que no todos compartan la manera como se desarrollan en algunas congregaciones.
Los ministerios de evangelista y de maestro tienen más espacio dentro del pueblo evangélico con distintos niveles de responsabilidades dentro y fuera de las iglesias locales.
Muchos de Uds. son líderes que desarrollan diversos ministerios en la iglesia local y es probable que varios de Uds. estén trabajando con organizaciones cristianas que, de una u otra manera, tienen relación con el pastorado. Hoy hablaremos de la tarea pastoral que deben ejercer como líderes cristianos.
Ser un ejemplo de vida personal y familiar 1 Corintios 11:1; Filipenses 3:17; 1 Timoteo 4:12; 1 Timoteo 3:4-7.
A) Ser un ejemplo de conducta cristiana
1- El ejemplo del apóstol Pablo. Con humildad y sinceridad se presentaba como modelo de vida cristiana. Él no pretendía haber llegado a la perfección pero, siguiendo fielmente a Cristo, constituía un modelo para ser imitado por los cristianos de su tiempo y por toda la cristiandad, Filipenses 3:12-17.
a) Supo aceptar las realidades de la vida, Filipenses 4:10-13.
b) Supo enfrentar el dolor y la injusticia sin quejarse y con gozo, Hechos 16:19-34.
c) Supo enfrentar el peligro con fe, Hechos 27:13-44.
d) Fue humilde y no permitió que lo endiosen cuando hizo milagros, Hechos 14::8-18.
e) Supo tratar a sus colegas, en Filipenses 2:19-30 escribe sobre Timoteo y Epafrodito. Cuando alguno actuaba mal lo corregía, como en el caso de Pedro en Antioquía, Gálatas 2: 11-14.
2- Sus enseñanzas. En 1 Timoteo 4:12, tenemos que ser ejemplo en:
a) Palabra. Tenemos que ser un ejemplo en la forma como nos expresamos tanto por las palabras que usamos como por el contenido. También tiene relación con el tono de la voz y la forma de decir las cosas, Efesios 4:29,31.
b) Conducta. Tanto en nuestras relaciones interpersonales, como en nuestra forma de actuar.
c) Amor, ágape, amor con responsabilidad.
d) Fe. Tenemos que evidenciar que realmente creemos en y a Dios.
e) Pureza. En nuestras motivaciones, como también con relación al sexo.
f) Como apreciamos la responsabilidad de ser ejemplos de vida es una responsabilidad ineludible.
B) Ser un ejemplo de conducta como familia cristiana 1 Timoteo 3: 4,5,7.
1- ¿Cómo debe ser y vivir una familia en esta sociedad posmoderna?
2- Los líderes deben ser un ejemplo que marque la senda para que los otros cristianos puedan seguirla.
a) ¿Cómo debe ser y llevarse un matrimonio cristiano?
b) ¿Cómo debe ser en trato de padres a hijos y viceversa?
c) Pablo nos da algunas enseñanzas claras en Efesios 5:20 a 6:4.
• Amor.
• Respeto.
• Responsabilidad.
• Comprensión.
• Complementación.
Ejercer su don y desarrollar el correspondiente ministerio 1 Timoteo 4:14,15
A) Debe conocer su don
1- Todo líder debe conocer los dones del Espíritu Santo que tiene y las capacidades naturales y ponerlos al servicio del Señor y de su iglesia.
2- Los cristianos necesitan conocer a líderes espirituales que tienen vidas santas y activas, para seguir su ejemplo. Todos tenemos dones desde el momento que aceptamos al Señor y recibimos el Espíritu Santo, 1 Pedro 4:10,11; Romanos 12:4-8.
B) Debe desarrollar el correspondiente ministerio
1- El Espíritu Santo da los dones como Él quiere, 1 Corintios 12:11-18.
2- Los dones determinan ministerios que permiten que la iglesia, como cuerpo de Cristo siga haciendo la obra de redención, Los diversos ministerios son: predicación, enseñanza, sanidades, liberaciones, alimentación de los hambrientos, ayuda a los necesitados y, si el Señor lo dispone resucitar muertos.
3- Los líderes deben ser ejemplos de cristianos responsables en el uso de los dones para permitir que la iglesia cumpla su misión.
Cuidar la doctrina y las prácticas cúlticas para que sean correctas 1 Timoteo 4:6-10,16
A) Conocer, practicar y enseñar la verdadera doctrina
1- Los líderes tienen mayor responsabilidad que los otros miembros de la congregación de conocer, practicar y enseñar la verdadera doctrina, porque se supone que:
a) Tienen más conocimientos.
b) Tienen, generalmente, una mente más ejercitada para el estudio y el análisis de las cosas. Es verdad que también se necesita discernimiento espiritual, pero el Espíritu Santo obrará cosas sorprendentes por medio de líderes capacitados detectando énfasis doctrinales que no son correctos, aunque se basen en textos bíblicos y produzcan resultados.
2- Pablo exhortó a Timoteo, y a todos nosotros, a tener cuidado de nosotros mismos y de la doctrina, 1 Timoteo 6:3-5. Hoy llegan a nuestras iglesias muchas enseñanzas que suenan muy agradables, que ofrecen poder, prosperidad y una vida maravillosa libre de sufrimiento basadas en pasajes bíblicos sacados de contexto. Los líderes debemos tener la responsabilidad de estudiar las Escrituras con el fin de comprobar hasta dónde es verdad lo que esos predicadores enseñan.
B) Cuidar que los cultos sean agradables a Dios
1- Este es otro motivo de conflictos en muchas iglesias. Los cultos han cambiado al punto que en algunas congregaciones parecen más una fiesta bailable que un acto espiritual dedicado a un Señor, cuya sola presencia nos destruiría por su gloria y grandeza.
2- Colosenses 2:6,7,18-23. En este pasaje el apóstol está previniendo a los cristianos de su tiempo sobre los gnósticos que decían tener un conocimiento especial de las cosas espirituales. Nosotros podemos aplicarla a nuestras realidades actuales. Hay personas que se presentan como los que tienen el conocimiento sobre la forma de adorar a Dios y dirigen a la gente a éxtasis y a condicionamientos emocionales que muy poco tienen que ver con el Espíritu Santo.
3- Los líderes deben tener discernimiento espiritual para determinar cuándo y cuánto es del Espíritu y cuánto es el resultado de un condicionamiento psicológico. Deben tener el valor de denunciar lo que no es de Dios y ayudar a las personas para que adoren y alaben a Dios como Él se merece.
Velar por el correcto liderazgo en la iglesia para que haya equilibrio 1 Pedro 5:1-5.
A) La autoridad de los pastores y de los líderes
1- Uno de los problemas que enfrentamos es el autoritarismo de algunos pastores. El apóstol Pedro escribía que debía pastorear la iglesia “no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplo de la grey” (5:3)
2- Los líderes tienen que velar para que los pastores desarrollen sus ministerios con amor, humildad y una actitud de servicio, que refleje respeto por la gente. Debe compartir el ministerio por medio de una correcta delegación de funciones con autoridad.
3- Los pastores tienen autoridad delegada del Señor, pero eso no les hace dueños de la gente. El pastorado es un ministerio más dentro de la gama que Dios estableció en Efesios 4:11. Es verdad que éste ministerio tienen la responsabilidad, en general, de presidir la iglesia, pero esto no da derecho al autoritarismo.
4- La autoridad espiritual se gana con el ejemplo de vida, no se impone. Es el resultado de una vida consecuente y bendecida por Dios, por eso no debe existir la impunidad que determina que los pastores pueden caer en pecado y resolver la situación sin recibir la disciplina correspondiente. En muchos casos siguen como si no hubiera pasado nada, 1 Timoteo 5:19,20. Estos temas deben ser analizados dentro del contexto de los estatutos y organización de cada iglesia o denominación.
5- Al expresar esto estoy diciendo que los líderes deben tener la autoridad espiritual y la capacidad para respaldar a los pastores y para ayudarlos a comprender que el ministerio pastoral no les da prerrogativas ni licencias especiales para hacer lo que quieran. Los líderes deben:
a) Amar a sus pastores, 1 Tesalonisenses 5:12,13
b) Obedecerlos, Hebreos 13:17.
c) Orar por ellos, Hebreos 13:18
d) Imitar su fe y estilo de vida, Hebreos 13:7.
e) Abonarle un sueldo digno, 1 Timoteo 5:17,18.
B) La responsabilidad de los líderes
Como factor de equilibrio los líderes deben:
1- Apuntalar y sostener a los pastores que tienen menos carácter, de tal manera que en la congregación no haya anarquía.
2- Contener y ayudar a ubicarse a los pastores muy extrovertidos para que no lleguen a ser irresponsables, como a los que tienen una personalidad muy fuerte que les lleva a enseñorearse de la iglesia. Tenemos un lamentable ejemplo en Diótrefes, 3
Juan 9,10.
3- Para lograr esto es evidente que existen diversos problemas:
a) Personalidad del pastor, algunos no escuchan, ni son enseñables.
b) El concepto del pastorado. Cuando el pastor es una autoridad indiscutible a quien o se le puede señalar nada, es muy dificil hacer algo.
c) Los estatutos y reglamentos de la iglesia o denominación.
d) Que no haya consenso en los líderes de mayor autoridad y antigüedad de la congregación.
Ayudar con el cuidado de la congregación
Todo líder tiene el privilegio, además de lo puntualizado, de hacer una tarea pastoral cooperando con el cuidado de la congregación. Todo líder debe amar a la congregación y respetar a sus integrantes cualquiera sea su condición social, cultural, espiritual, etc. Esta tarea será de acuerdo con sus dones, pero hay algunas cosas que deben tener presente:
A) Discipular. Todos podemos hacerlo ayudando a los cristianos recién convertidos. Aquellos que tienen mayor experiencia pueden colaborar con el discipulado de los futuros líderes, capacitándolos para que desarrollen diversos ministerios.
B) Aconsejar y orientar. A nuestras iglesias llegan permanentemente personas muy conflictuadas que necesitan ayuda y orientación. También hay muchos cristianos que necesitan consejería por diversos motivos: espirituales, morales, emocionales, sentimentales, laborales, etc.
C) Predicar y enseñar. Si tenemos los dones correspondientes podemos ser de gran ayuda a nuestros pastores en estas áreas tan importantes.
D) Presidir o colaborar con el departamento de alabanza. Cada día se necesitan más personas que tengan capacidad para programar cultos que sean agradables al Señor, con armonía en los instrumentos, buen gusto en la combinación de los coros y con un sonido que no aturda a los presentes ni afecte a los vecinos.
E) Administrar. En este tiempo, como quizá nunca antes, necesitamos personas capacitadas para administrar y llevar la documentación contable de la iglesia. Esto es esencial para que haya claridad en el manejo de los fondos, como para responder a los requerimientos impositivos del país. También deben cooperar en la confección de los proyectos para que no sean faraónicos, sino realizables.
F) Disciplinar y restaurar. Frente a pecados e inconductas la iglesia debe disciplinar a los miembros que fracasan. Los líderes deben acompañar al pastor en estas experiencias que son muy dificiles y colaborar con la restauración de los hermanos que cayeron en pecado.
G) Mediar. Frente a relaciones interpersonales conflictivas o a situaciones de problemas con miembros, líderes y/o pastores, se necesitan líderes con capacidad para mediar de tal manera que los conflictos se resuelvan sin que haya ruptura en la congregación. Habrá ocasiones cuando haya que mediar con vecinos o familiares de miembros de la iglesia que no son cristianos y que quieran hacer juicio por alguna causa. En esas circunstancias se necesitan líderes con la capacidad técnica y espiritual para mediar.
H) Integrar. Este es un punto importante. Por nuestras congregaciones pasan centenares de personas que no se integran. Algunas iglesias son muy cerradas, los nuevos no tienen lugar. No hay planes para integrar creativamente a los nuevos. Los líderes deben cooperar creando espacios de servicio para que todos puedan integrarse, sintiéndose útiles al hacer alguna tarea.
Conclusión
Todos Uds. son líderes y tienen el privilegio de cooperar con sus pastores con el propósito que las iglesias locales puedan cumplir con la misión por la cual existen. Uds. pueden cooperar para que se desarrollen ministerios con calidad, de tal manera que impacten en esta sociedad tan necesitada de Dios en la cual estamos viviendo.
Los líderes deben obrar con amor, fe, responsabilidad, autoridad y sujeción. No deben ser indiferentes a las cosas que pasan en la iglesia y no deben permitir que haya desviaciones doctrinales o cúlticas que deshonren al Señor. Por eso les animo a que asuman su responsabilidad y se pongan al servicio de sus pastores ayudándoles con amor y respeto.
Lic. Rogelio Nonini
